domingo, mayo 30, 2010

Incansables máquinas repetidoras

Me doy cuenta de que no somos sino máquinas que no cesan de repetir lo que nos dicen que debemos decir.
Seres sin criterio, burdos intentos de humanos guiados a placer por una voluntad que no es la nuestra; seres sin imaginación, opacos o mejor dicho traslúcidos casi transparentes sin peso específico es nuestras vidas sin imaginación sin metas más allá del placer mundano, de la comodidad o de las riquezas materiales.
Máquinas depredadoras, ambiciosas, egoístas.

1 comentario:

Nad Leiruc dijo...

Estamos atrapados en un sistema, pero hay momentos en los que podemos ser libres. 222